En
Mazatlán, el número de teatros y museos que hay disponibles pueden contarse con
los dedos de la mano; incluso nos sobrarían. Si bien se reconoce que el puerto
tiene prestigio a nivel nacional como destino turístico de playa, el arte
también promueve el turismo y, por lo tanto, tiene efectos positivos a nivel
regional. Entonces, ¿qué ocurre con la oferta artística y cultural mazatleca?
Como primera instancia, se acepta
que las finanzas deciden sobre las artes. El mundo actual se rige por las leyes
de la oferta y la demanda; si es un negocio rentable, entonces se apoya. La
calidad de las obras artísticas se reduce al convertirse en mercancías
producidas en masa.
Se reconoce, también, que existe una
exigencia hacia el Estado para que apoye financieramente a las artes; en forma
de subsidios a teatros y museos y a otras instituciones artísticas.
¿La intervención del gobierno puede afectar
el crecimiento de espacios culturales y artísticos en Mazatlán?
Toda
obra valorada como patrimonio para la humanidad se convierte en un bien
público, lo que conlleva a que la remuneración para los artistas disminuya. El
arte y la cultura valen por la cantidad de dinero que los políticos están
dispuestos a invertir en ellos.
¿Y qué hay de la sociedad? ¿Es que
toda decisión está sólo en manos del gobierno? La mayor parte de la sociedad se
pronuncia a favor de la intervención estatal en las artes y la cultura hasta
que se toca el tema de la financiación de estas actividades.
Como se sabe, las obras públicas
están sustentadas por los impuestos de los ciudadanos; y la creación de más
espacios, por lo general, resulta en un aumento de éstos. Algunas personas
aceptan esta medida como razonable por el beneficio que trae a la comunidad, otras
proponen reducir gastos en otras áreas y también existe un sector que rechaza
rotundamente la resolución.
Entonces,
¿cómo pueden ayudar las autoridades a las artes?
Quizás
lo más importante es definir si vale la pena el apoyo “eficaz” del gobierno,
aunque se sufran los efectos de la lucha de intereses de las instituciones o
personajes que proporcionan o reciben ayuda. La autoridad, en todo caso, sólo
debe intervenir para mejorar la creación y las condiciones de venta para los
artistas y facilitar el acceso al arte por parte de los consumidores.
Los derechos de autor y de
publicación, y políticas de precios accesibles a espacios artísticos y
culturales, son ejemplos de participación estatal beneficiosa para la producción
de obras en Mazatlán.
Hay talento aquí, solo falta apoyarlo!
ResponderBorrarMe encantó la frase: "El arte también promueve el turismo" porque hay mucho turismo cultural, y sí, el gobierno es responsable en parte al intervenir para mejorar la creación y condiciones de venta. Pero mucho también tiene que ver la sociedad, el no quitarle valor al trabajo de los artesanos al regatearles las piezas ._.
ResponderBorrarEn cuanto a Mazatlán se refiere, en estos días la Sectur en conjunto con las empresas prestadoras de servicio y turísticas del puerto se encargarán de recibir a periodistas de diferentes medios de comunicación para precisamente promover las artesanías del sur de Sinaloa como atractivo turístico :D
Me encantó la frase: "El arte también promueve el turismo" porque hay mucho turismo cultural, y sí, el gobierno es responsable en parte al intervenir para mejorar la creación y condiciones de venta. Pero mucho también tiene que ver la sociedad, el no quitarle valor al trabajo de los artesanos al regatearles las piezas ._.
ResponderBorrarEn cuanto a Mazatlán se refiere, en estos días la Sectur en conjunto con las empresas prestadoras de servicio y turísticas del puerto se encargarán de recibir a periodistas de diferentes medios de comunicación para precisamente promover las artesanías del sur de Sinaloa como atractivo turístico :D