El cine llegó a
Mazatlán en 1897, dos años después de que los hermanos Lumiére ofrecieran su
primera función en París en el año 1895. Las primeras funciones de cine en
Mazatlán se hicieron en lo que hoy es la Plazuela Machado, antes de
relocalizarse al Teatro Rubio en el Ángela Peralta.
Lo que se proyectaba en sus inicios
después de su llegada a Mazatlán eran las llamadas vistas, las cuales duraban un minuto o incluso segundos. Dichas
imágenes causaban gran impacto en los espectadores que llegaban a apasionarse;
con miedo, se persignaban al ver dichas imágenes. Las cintas eran proyectadas
bajo el patrocinio de un mazatleco de apellido Maxemin. Después llegaron
exhibidores reconocidos de la Ciudad de México: Carlos Mongram y los hermanos
Salt.
Como si fueran circos, que van de
ciudad en ciudad, los exhibidores de cine en esa época colocaban sus carpas, y
muchos de los proyeccionistas grababan vistas de cada ciudad a la que iban para
mostrarlas a sus espectadores; así el asombro con la magia del cine de éstos
era más grande.
Los exhibidores se anunciaban por
periódico, las vistas que se grababan era a la gente en su vida cotidiana;
personas saliendo de misa, caminando por la calle, esperando el transporte,
etc. Imágenes tan comunes pero que llamaban tanto la atención que los cines se
llenaban a más no poder, y el deseo de muchos era verse en aquellas vistas.
Vistas y películas grabadas en Mazatlán
Las primeras vistas creadas por los hermanos Lumiére
consistieron en la salida de los obreros de la fábrica Lumiére y la llegada de
un tren. En el caso de está última, las personas que jamás habían visto el
caballo de acero, se asombraron al ver esa grande y extraña máquina. Algunas se
asustaban al pensar que el tren se saldría de la pantalla.
En Mazatlán, por ejemplo, filmaron vistas en la salida de la catedral,
tomas de la playa, etc. Lo que estas vistas producían a las personas era tan
impresionante que quienes se encontraban visualizando las imágenes llegaban a
pedir que repitieran la misma escena hasta 20 veces seguidas. Hoy en día no hay
documentación sobre las imágenes grabadas.
A principios del siglo XX, cuando el
cine mudo estaba en su apogeo, se llegó a filmar alguna película, de la cual
tampoco existen archivos. Sin embargo, ya de épocas más recientes, podemos
encontrar evidencias de la superproducción Los
reyes del sol, la cual causó mucho escándalo durante su realización, ya que
el uso masivo de extras fue muy llamativo. La película se filmó en Cerritos
cuando éste era aún baldío.
Mucho se habló después de esta
producción sobre los planes de Hollywood para montar un set permanente para la
filmación de sus películas, como lo hay en el estado de Durango. Se argumentaba
que los atractivos del puerto eran unas de las razones, otra razón los costos
bajos. Sin embargo, todo esto quedó solo en rumores. El fracaso de Los reyes del sol pudo ser una más de
las razones.
Otros de los filmes grabados en
Mazatlán fue el thriller El Asesino se
Embarca de 1967, dirigida por Miguel M. Delgado. Por otra parte Oscar
Blancarte, un director local, filmó varias películas en el puerto como: Entre la tarde y la noche, Si me han de
matar mañana, etc.
Hacer cine es un proceso creativo
muy complicado, además de que la distribución le hace a uno conformarse con
exhibirlo en los teatros locales.
Hubo una época en que el cine mexicano
dominó las salas de cine. Habían distribuidoras de películas nacionales,
exhibidores, agremiados, entre otros. Sin embargo, toda la industria fue
decayendo gracias a los cambios que ha sufrido el cine con el paso de los años.
Es decir, todavía funciona, todavía hay sindicatos, pero ya no con la misma
fuerza que antes. El cine fue decayendo gracias a la aparición de la
televisión. Después llegó el VHS, DVD, etc., por lo que las salas que antes
eran para un cupo de 3000 personas, bajaron y las que hoy son de 100 a 300, no
logran llenarse.
Salas de cine
Las salas de
cine en Mazatlán han desaparecido. Se han esfumado para darle lugar a las
grandes cadenas como Cinepolis y Cinemex, que son las salas de cine que abundan
en Mazatlán y cuentan ahora con la preferencia del público, ambas con 3
sucursales que están dentro o a un lado de un supermercado, el cine se
convirtió en un producto más que puedes agregar al carrito; se convirtió en status. Los Cinemas Gaviotas es el único
establecimiento mazatleco que sobrevive -y lo hace a duras penas-, pero sus
instalaciones ya se ven desgastadas.
El Cine Reforma es ahora un edificio
en ruinas y hogar para indigentes, sólo queda el cascarón de lo que fue en su
época uno de los cines favoritos de los mazatlecos. El Cine Zaragoza también
desapareció, la calle Aquiles Serdán la única vista que exhibe ahora es la del
abandono.
Cabe destacar que para
crear una nueva cultura del cine en Mazatlán se tendría que empezar desde cero,
ya que prácticamente no existe; y lo que existió alguna vez, ya fue hace muchos
ayeres que no pasa por una sala de cine.
Muy buena información... me hubiera gustado presenciar la llegada del cinematografo a Maza...
ResponderBorrarLa historia es lo mejor... Si seras benja, si seras...!!!
ResponderBorrarInteresante mirada a la historia del cine en Mazatlán, aunque un tanto extraña para mí que crecí en la época de las grandes cadenas multinacionales. Como sea, muy valiosa la información.
ResponderBorrarSiempre impacta el saber como surgen las cosas. En el caso del cine no es la excepcion. Aunque tenia un poco de referencia del surgimiento del cine, desconocia el caso peculiar de cómo llegó a Mazatlán. Excelente reportaje,
ResponderBorrarAhora solo falta esperar si estas nuevas cadenas llegaron para quedarse o en un futuro también las veremos desplazadas.
ResponderBorrarAhh, para nosotros que somos la nueva generación ya no nos tocó, pero me hubiera encantada conocer esas primeras salas de cine.
ResponderBorrarBuen artículo aunque me hubiera tambien gustado leer algo sobre los cines Terraza, Diana y Ángel Flores
ResponderBorrarQue fue del cine terraza su final
ResponderBorrar